Introducción

A comienzos de noviembre de 200l, Michael Rezendes revisaba una pila de documentos fotocopiados en su escritorio del diario Boston Globe . Los documentos constituían evidencia en una serie de querellas civiles en curso en contra del ex sacerdote católico John Geoghan, acusado por más de 100 personas de cometer abusos sexuales. Rezendes descubrió que algunos de los documentos eran muy importantes. Uno de ellos era explosivo.

Rezendes integraba el Equipo Spotlight, un equipo de investigación del diario compuesto por cuatro personas. En julio de ese año, el nuevo editor del Boston Globe , Martin Baron, había pedido al equipo investigar el problema de los abusos sexuales en la famosa Arquidiócesis Católica de Boston. Los investigadores tenía dos objetivos: averiguar si el caso de Geoghan era parte de un patrón de abusos sexuales por parte de sacerdotes, y, si fuese así, descubrir si la arquidiócesis había protegido a los perpetradores y ocultado sus crímenes.

Para principios de noviembre, el  Equipo Spotlight había descubierto una historia mucho más grande de lo que esperaba inicialmente. A través de la revisión de documentos y conversaciones con víctimas y abogados, habían encontrado evidencia que sugería que muchos sacerdotes, tal vez decenas, habían abusado a niños, y que la iglesia no sólo intentó encubrir sus crímenes, sino que – al trasladarlos a nuevas parroquias – también les permitió seguir cometiéndolos. Ninguna pieza de evidencia era más importante que el documento descubierto por Rezendes. Ese documento comprobaba que el poderoso arzobispo de Boston, el Cardenal Bernard Law, sabía del historial de pedofilia de Geoghan antes de reubicarlo en parroquias donde muchos de sus presuntos crímenes fueron cometidos.

Los reporteros de Spotlight planeaban publicar un gran reportaje sobre Geoghan en enero, para que coincidiera con el inicio de su juicio. Querían que el reportaje fuera a prueba de balas. Así operaba Spotlight, y tenía aún más sentido en este explosivo caso. Boston era una ciudad de mayoría católica, la única en el país, y la arquidiócesis era la institución más poderosa de la ciudad. El reportaje tenía el potencial de remecer la ciudad hasta sus cimientos. Para complicar aún más las cosas, muchos católicos de Boston ya consideraban que el Globe era un periódico liberal, elitista y anti-católico.

El documento que tenía Rezendes era público: era parte de un expediente que cualquier reportero judicial podría encontrar. Aunque los periodistas del Globe estaban seguros de que estaban mucho más avanzados en la historia que sus competidores, este documento en sí era una gran noticia que no querían perder ante un medio de comunicación rival. El equipo tenía que tomar una decisión. Podía seguir adelante según el plan y dejar el artículo sobre el Cardenal Law y Geoghan hasta enero, o podía publicarla lo antes posible. El instinto básico de competencia indicaba que había que publicarlo de inmediato. La necesidad de ser exhaustivos y lograr el máximo impacto posible señalaba que había que esperar.