Crece la base de datos

Para mediados de octubre, no obstante, la etapa de cobertura más intensiva del 11 de septiembre había finalizado, y los periodistas de Spotlight retomaron su investigación. Continuaron revisando los directorios y eventualmente identificaron a más de 100 sacerdotes con destinaciones sospechosas.

También inventaron otras maneras de identificar a sacerdotes sospechosos. Por ejemplo, armaron una lista de todos los abogados, incluyendo abogados de la iglesia, que habían trabajado en casos de abusos sexuales que involucraban a sacerdotes. Carroll tenía un contacto en los tribunales quien, usando el número de la Junta de Supervisores de los abogados, identificó todos sus casos durante los últimos 15 años – más de mil en total, incluyendo muchos en los cuales se acusaba a sacerdotes. Estos casos llevaron a más abogados, que a su vez condujeron a más casos.

En algunos casos, el computador no tenía ninguna información sobre casos específicos, así que los reporteros iban al tribunal para obtener los expedientes y descubrían que habían sido incautados: después de los acuerdos extrajudiciales, los jueces habían accedido a la solicitud de la iglesia de sellar los registros – una señal de la deferencia con la que era tratada la iglesia. Era como si estas querellas nunca hubiesen existido. En respuesta, el Globe solicitó a los jueces reabrir esos expedientes.

No todos los métodos del Equipo Spotlight eran tan complejos o consumían tanto tiempo. Era un secreto mal guardado que la iglesia utilizaba una mansión en Milton para acoger a  sacerdotes que estaban entre destinaciones. Por casualidad, la mansión quedaba apenas a un cuarto de milla de la casa de Robinson. Al revisar los registros de residencia en la municipalidad de Milton, Robinson descubrió que alrededor de doce sacerdotes habían inscrito amablemente la mansión como su lugar de residencia.

Con el tiempo, el equipo descubrió que gran parte de la información que había reunido reafirmaba – y era reafirmada -  por información que ya tenía. Podía ser que un sacerdote citado por un abogado ya estaba en la base de datos de Spotlight porque había anotado la mansión Milton como su residencia. O que los directorios mostraban que un sacerdote había tomado “licencia médica” dos semanas después de que la iglesia recibiera una denuncia sobre su comportamiento.

Mientras tanto, aguardaban el fallo sobre la demanda presentada por Baron y continuaban entrevistando a víctimas.